Nojoda...
¿Saben algo? Cada día me convenzo más de que el mundo está gobernado por idiotas. Sí, por idiotas (con el perdón de los discapacitados mentales, que tuvieron la mala leche de venir a este basurero de mundo a sufrir la indiferencia de la sociedad).
Pero hablemos de idiotas. En ocasiones, veo por la blogósfera cómo en el amplio pero desenfrenado mundo de la internet se ven cosas tan increíbles de pensar como el hecho de que mientras existen (mejor dicho, subsisten) tanta gente muriendo de hambre, a lo sumo a veces comiendo
mierda (porque, lamentablemente, es lo más que algunos pueden conseguir), ¡el mundo está más preocupado de seguir una moda o un estilo de vida que ocuparse de ayudar a que el mundo sea más mundo y menos
cagadero social! No tienes ni
puto centavo para comer, pero gastas tus malditos ahorros en lo último en teléfonos (que al fin y al cabo es simple y pura chatarra
mierdera), o en pagar una hora de internet sólo para chatear o ver las
mariqueras que publican otros (¿se ha visto semejante desperdicio, chico?); o en ocasiones, hasta lo más común entre los que usan
smartphones: descargar jueguitos igual de idiotas que los que lo usan.
Ya que tocamos este tema, sorprende cómo la juventud de ahora (ESTÚPIDAMENTE CONSUMISTA), le ha dado por estos últimos años (pongámosles, no sé, cinco o diez años) por usar la "autopista de la información" para descargar SÓLO PURAS
MARIQUERAS. Infinidad de juegos y de aplicaciones gafas que, hasta la fecha, no tengo ni la menor idea de cómo les va a ayudar en sus
vainas de estudio (porque, tengo entendido no sé, el objetivo primordial que se planteó el gobierno de colocar redes Wi-Fi en cada plaza Bolívar de este país era precisamente el ayudar a que los jóvenes tuviesen más acceso a la tecnología, contemplado en el artículo 3.390 de la Ley de Ciencia y Tecnología, con fines MERAMENTE EDUCATIVOS Y DE SANO ENTRETENIMIENTO).
Se preguntarán porqué digo estas cosas. Bueno, esto vengo a traerlo a colación porque hace pocos días (hace unas dos semanas se cumplen hoy 20), salió un sujeto (con una pinta de loco, de hecho) haciendo pública una
app (me imagino, fue el tercio que le dió la
picazón de nalga de desarrollarlo) que no es otra cosa que un simple y ridículo juego llamado Pokemon Go. El juego, al parecer, está basado en el perolito que los
cabeza de goebo de la serie del mismo nombre usan para identificar los bichos que consiguen. Supuestamente, el juego usa como recurso la cámara del teléfono para hacerle aparecer en pantalla un supuesto animal poke
verga al lado de cualquier cosa: la poceta, la bolsa que te llegó del CLAP, la mata de mango, etc. La idea es atraparlo y tal vez (no sé si la tecnología llegará a eso) compartirlo por el Facebook, o el Instagram, o el Twitter o no sé. Obviamente, para eso se requiere estar en internet (preferiblemente por el ya mentado sistema inalámbrico).
Y ahora digo yo ¿Eso es todo? ¿Esa sola
verga es lo único que hace? ¿Y entonces, el que agarre más es el que más score tiene, el "papa de los helados" como dicen? ¡
Coño, qué perdida de tiempo, mano! Yo pensaba, les diré que otros juegos como Candy Crush, CityVille, Plantas vs. Zombies, Happy Acress e inclusive el que sacaron los Simpson hace ya un tiempo eran una pérdida de tiempo y de espacio en memoria (aparte de energía, porque si lo reconocemos, esas pilitas de teléfono no rinden para nada). Pero éste, como que se lleva la corona. ¿Saben cuándo dura bajar esta aplicación, Pokemon Go? ¡Nada menos que 56 MB! Una persona que use, por ejemplo, internet de pendrive, se le gasta el saldo en eso. Y los que tengan Wi-Fi, o tienen un buen teléfono con buena antena; o son millonarios para pagar la tarifa del ABA que, ahora CANTV anunció subirá en agosto. La gente está arrecha, por cierto.
Pienso que hay que ser bien pendejo para descargar eso. ¡Y PARA NADA! Porque igualito, sacan otro juego, tal vez hasta más
cabeza de machete que éste Y YA DEJAN DE BUSCAR POKEMONES! Yendo por el mismo camino de la cagalera de juegos que se han puesto de moda...
Descarguen algo útil, vale: un diccionario, un traductor, un voltímetro, un alejador ultrasonido de mosquitos, una agenda, una aplicación para editar documentos de Office, no sé. ¿Qué
carajo van a hacer con un juego tan
pendejo como éste?
Otra cosa. No sé cuál es el grado de idiotez que tenga el que ya haya sido engatusado con este dizque juego. Pero una cosa sí advierto: los que vayan a usarlo, tengan cuidado. No se les ocurra jugarlo en la calle, porque si más de uno se lo ha llevado un carro por estar de zombie con los audífonos puestos o chateando ¡No me imagino cuando un carro de esos de taxis amarillos les den ese
coñazo y estén tan
apendejeados que crean que fue un Pikachu, pobres
huevones!